La Semana Santa ya casi está aquí, así que hoy traemos un plan para los rezagados que aún no hayan decidido dónde van a pasar esos días. Un plan para conquistarles por el estómago y ¡de la manera más dulce!
Si por algo se distingue Castilla y León es por la variedad y la calidad de su gastronomía: guisos, asados, quesos, vinos, embutidos y dulces. En Semana Santa, entre los platos más típicos destacan sus dulces y no son pocas las variedades que podrás degustar si te vienes durante estos días, ya sean típicas de la región de Castilla y León o de todo el país.
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Dulces de Semana Santa en Burgos
- Las clásicas torrijas. ¿Quién iba a pensar que un postre tan sencillo podía funcionar tan bien? Pan, leche, huevos y azúcar como base y, a partir de ahí, la creatividad y los secretos de las recetas de las abuelas, son ingredientes añadidos que sorprenderán a nuestro paladar. Aunque son comunes por casi toda España, en Burgos son especialmente destacadas. El pasado año incluso dedicaron una iniciativa, enmarcada dentro de la pertenencia de la ciudad a la red de Ciudades Creativas de la Unesco, dirigida a promocionar este dulce a través de 40 locales ubicados por toda la ciudad.
- Monas de Pascua. Aunque son más típicas de otras comunidades, como Valencia o Cataluña, también están especialmente asentadas en León. Seguramente no te será difícil encontrar este dulce, con el que tradicionalmente se celebraba el fin de la cuaresma, en varias pastelerías de Burgos. Originalmente, era una masa de pan dulce que se decoraba con un huevo duro, pero ha ido evolucionando a una especie de roscón, con huevos de chocolate, frutas u otros ingredientes que le aportan sabor y colorido.
- Rollos fritos. Sin duda, otro clásico de las abuelas en Semana Santa. Son muy típicos en Albacete, aunque en general las clásicas rosquillas están muy extendidas por todo el país. Dependiendo del lugar variarán sus ingredientes, pero su base está formada por harina, huevos, azúcar y un toque de anís.
- Bollos de Pascua. Bizcochos típicos de Ávila que, al igual que las monas, tradicionalmente eran un regalo de los padrinos y madrinas a sus ahijados para celebrar el fin de la cuaresma. No llevan levadura, sino que es necesario batir los huevos con el azúcar y la mantequilla para que doblen su volumen, ¡deliciosos!
- Buñuelos. Otro habitual de esta época que compite directamente con las torrijas por el protagonismo más dulce de la Semana Santa. Al igual que estas, también son muy sencillos de elaborar, pero no por ello son menos sabrosos.
¿Te hemos abierto el apetito más dulce? Esperamos que sí, despertando también tus ganas de venir a visitar Burgos durante esta próxima Semana Santa. No te lo pienses más, te esperamos en nuestro abba Burgos hotel. Haz tu reserva directamente desde la web, con el precio mínimo garantizado y sin cargos de gestión.