El Cementerio de Comillas no es solo un lugar de descanso eterno, es una obra de arte que encapsula la historia y la cultura de Cantabria. Situado en la localidad cántabra de Comillas, este camposanto es conocido por su impresionante fachada, declarada Bien de Interés Cultural desde 1983. En este artículo, te hablaremos del cementerio y su historia, un punto de visita imprescindible si te alojas en abba Comillas Golf Hotel.
El pasado del Cementerio de Comillas
La historia del Cementerio de Comillas es tan fascinante como sus monumentos. Se ubica en el sitio de una iglesia parroquial del siglo XV o XVI, que fue abandonada tras un incidente durante una misa mayor. Y es que, tras el incidente regidor de Comillas mandó construir otro templo, quedando así abandonada la iglesia parroquial. Este evento marcó el comienzo de una nueva era para el espacio, que limitó sus funciones a la de cementerio.
Arquitectura modernista y arte escultórico
La ampliación del cementerio en el siglo XIX fue dirigida por Lluís Domènech i Montaner, una figura clave del modernismo catalán. Esta ampliación se llevó a cabo, principalmente, en 1893, cuando Domènech i Montaner introdujo elementos nuevos, conservando las ruinas del templo abandonado.
Su visión artística se refleja en cada rincón del cementerio, desde las tumbas hasta los mausoleos, creando un espacio donde la muerte y el arte conviven en armonía. Así, el Cementerio de Comillas se presenta con una imponente fachada, coronada por un arco semicircular bajo un tejado a dos vertientes. La entrada se define por una elegante puerta de hierro forjado, situada justo debajo del arco. Un robusto muro de piedra envuelve el recinto, culminando en una variedad de pináculos ornamentados con cruces que se adaptan a las irregularidades del terreno sobre el cual descansa el cementerio.
Entre las obras destacadas se encuentra la escultura del Ángel Exterminador de Josep Llimona, una imagen icónica que define la estética del lugar. Esta imponente figura alada de un ángel con espada en mano representa la última parada antes del más allá y es una de las imágenes más fotografiadas del recinto.
Un destino turístico único
El Cementerio de Comillas es una parada obligatoria para los amantes de la historia, la arquitectura y el arte. Su ubicación cerca del mar, sobre un promontorio, lo hace visible desde buena parte de Comillas y le otorga un gran valor estético. Gracias a esto, el cementerio ha logrado atraer a visitantes de todo el mundo, fascinados por su patrimonio cultural y su impresionante entorno natural
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