Hoy os traemos un recorrido por 5 lugares históricos de Santander para que conozcáis un poco más la historia de la capital cántabra y algunos de sus puntos más emblemáticos.
Os invitamos a alojaros en nuestro abba Santander hotel durante vuestra estancia en la ciudad y a descubrir estos lugares en vuestra visita a una de las localidades más bonitas de España. ¡Os esperamos!
Catedral de Santander
La Catedral de Nuestra Señora de la Asunción de Santander es un edificio histórico religioso que presenta la curiosidad de estar conformada por dos iglesias superpuestas. La primera de ellas, situada en la planta inferior, data del primer tercio del siglo XIII; la segunda, en la planta superior, se acabó de construir en la segunda mitad del siglo XIII.
Un dato importante es que la segunda iglesia fue reconstruida y ampliada tras el incendio que sufrió Santander en 1941. Llama mucho la atención el claustro de la catedral, de estilo gótico, que formaba parte de un antiguo monumento del barrio medieval de la ciudad. Está conformado por varias naves que se alzaron en distintas etapas. Aún conserva sepulcros de abades y caballeros, así como elementos tallados recuperados durante reconstrucciones.
Refugio antiaéreo de Santander
Durante la Guerra Civil, con el fin de proteger a los ciudadanos de los ataques aéreos, se construyeron distintos refugios subterráneos en diversas ciudades de España. Uno de ellos es el de Santander.
Ubicada bajo la Plaza del Príncipe y construído en 1937, el refugio tiene casi cien metros donde de cobijaban los santanderinos de los bombardeos aéreos.
Actualmente, el refugio antiaéreo se puede visitar de manera gratuita. Todos los visitantes tendrán la oportunidad de experimentar los crueles momentos de la Guerra Civil a través de sonidos de explosiones, apagones de luz, sirenas de alarma de fondo e incluso reproducciones de siluetas de aviones junker 52 que bombardearon la ciudad.
Muralla de Santander
La Muralla de Santander fue recinto defensivo que resguardó durante siglos la ciudad de Santander. Su historia está unida con la evolución de la ciudad a lo largo de los tiempos.
Se erigió inicialmente como una respuesta a la necesidad de proteger el castillo y la antiquísima abadía de las posibles amenazas. Este cerco rodeaba también las residencias principales de la villa y protegía a los ciudadanos que residían en el interior del recinto.
En 1775, tras ser declarada capital, Santander experimentó un gran crecimiento urbano que obligó a edificar nuevas viviendas fuera de los confines de la muralla, dando así, una época de expansión para la ciudad.
Edificio del Banco Santander
El edificio que durante un siglo albergó la sede del Banco Santander, y por el cual se le reconoce, ha sido testigo del paso del tiempo y se le ha dado muchos usos. Se alzó en 1795, pero en 1880 fue reconstruido de nuevo tras un incendio. El Banco Santander lo compró en 1919, cuando funcionaba como hotel y club de regatas. El arquitecto Ricardo Bastifa fue el encargado de llevar a cabo la remodelación del edificio.
Actualmente, está en proceso de transformación a un espacio dedicado a la cultura y al ocio.
Monumento a los Caídos en el Faro
En el Faro del Cabo Mayor de Santander se alza un monumento a los caídos durante la Guerra Civil española. Pese a que el monumento no presume de la antigüedad de los mencionados anteriormente, sí guarda un fuerte componente histórico que perdura en la mente de muchos españoles.
El monumento se levantó en 1941 a petición de la Jefatura Provincial de Movimiento, los creadores son Valentín Ramón Lavín de Noval y el escultor castreño José Villalobos. Ambos son los artistas de dicho monumento conformado por una cruz de cemento que se eleva sobre un pedestal. Se distingue una figura que simula agarrarse al saliente del monumento y parece mirar hacia abajo, hacia donde el oleaje golpea con fuerza contra las rocas. Un claro guiño a aquellas víctimas que fueron arrojadas sin vida al mar durante los fusilamientos de la Guerra Civil.